Verónica Rodríguez Pulido (Asturias, 1988). Remo. En Tokio debuta en unos Juegos Paralímpicos.
¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de unos Juegos?
Me tragué todo lo que dieron por televisión de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Sídney 2000.
¿Qué cosas no pueden faltar en su maleta cuando viaja para competir?
La cajita con las cenizas de mi madre, eso siempre me acompaña.
Completa la frase. Si gana una medalla en Tokio…
Me sentiría muy realizada en esta vida.
¿Qué apuesta estaría dispuesta a hacer por ganar una medalla?
Cualquier reto que me digan. Desde que estoy en el remo perdí todos los miedos, como el de la claustrofobia en un ascensor, así que me da igual la propuesta que sea con tal de ganar una medalla.
¿Un momento imborrable en su carrera?
Cada una de las concentraciones con mis compañeros de la selección española en Laias (Ourense).
¿Alguna manía antes de salir a competir?
Siempre me persigno.
Un defecto y una virtud.
Soy muy alegre, pero me enfado bastante si las cosas no salen bien, así que diría que mi carácter, tanto defecto como virtud.
Una frase o lema.
La vida se ve de otro color con una sonrisa. La llevo tatuada en el brazo izquierdo.
De no haber practicado remo, ¿qué deporte le habría gustado hacer?
Tenis.
¿A qué personaje retaría en su deporte?
A Saúl Craviotto, se prepara también en el embalse de Trasona y me encantaría compartir un entrenamiento con él.
¿Qué fotos decoraban su habitación cuando era pequeña?
Me encantaba la selección española fútbol y tenía fotos de Sergio Ramos o Iker Casillas.
Cuando era niña, ¿con qué soñaba ser de adulta?
Con ser profesora de personas con discapacidad. Estudié magisterio y entré en la ONCE para eso, aunque ahora me dedico a la venta del cupón.
Algo que aún no haya hecho y que le gustaría hacer.
Tirarme en paracaídas.
Si fuese presidenta del Gobierno, ¿qué cosas haría o cambiaría?
Apoyaría mucho a las personas con discapacidad y fomentaría que la gente hiciera deporte.
Si pudiera cenar con cualquier personaje, ¿a quién elegiría?
A Merche, la cantante.
¿Cuál es su forma de desconectar?
Cuando navego por el río con la chalana.
¿Qué alimento nunca falta en su nevera o despensa?
Las manzanas.
¿En qué tarea doméstica podría aspirar a medalla?
Cocinando, me sale muy buena la pasta.
¿Qué suele ver en televisión?
Series de Netflix.
Una canción que le motive.
‘Te voy a decir una cosa’, de Amaia Montero.
Reportaje. Verónica Rodríguez, de ‘princesa’ de chalanos a unos Juegos Paralímpicos