Israel Rider Ibáñez (Barcelona, 1971). Ciclismo. Debuta en unos Juegos Paralímpicos.
¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de unos Juegos?
Los Juegos Olímpicos de Barcelona’92, los viví muy de cerca. Recuerdo el día en que nombraron a Barcelona como sede, lo celebramos a lo grande en el colegio.
¿Qué cosas no pueden faltar en su maleta cuando viaja para competir?
Pasamos tantas horas en el hotel que siempre tengo que llevar instalada la aplicación de Netflix para ver películas o series. Es lo único que no me puede faltar.
Completa la frase. Si gana una medalla en Tokio…
Supondría cumplir un sueño, sería el hombre más feliz y significaría que tantos años de sacrificio han valido la pena.
¿Qué apuesta estaría dispuesto a hacer por ganar una medalla?
Es algo que no me gusta nada, pero sería capaz de raparme la cabeza por ganar una medalla -ríe-.
¿Un momento imborrable en su carrera?
El Mundial en Maniago (Italia) en 2018, ganamos el bronce en el Team Relay y el campeonato fue espectacular con mucha afluencia de público, algo difícil de ver en nuestro deporte. Y también la primera medalla que ganamos en la Copa del Mundo en Emmen 2017, íbamos sin expectativas y fuimos terceros.
¿Alguna manía antes de salir a competir?
Estar muy concentrado, sin hablar, me paso el día pensando solo en el momento de salir a correr.
Un defecto y una virtud.
Soy muy cabezón, por mucho que sepa que voy a sufrir, una vez en la bici no pienso en nada más que en apretar al máximo. Me sirve como defecto y virtud.
Una frase o lema.
No tengo ninguna frase motivadora, solo pienso en salir y dar el máximo en cada pedalada.
De no haber practicado ciclismo, ¿qué deporte le habría gustado hacer?
Me quedaría en ciclismo, me gusta lo que hago, no creo que hiciera otro deporte. Cuando deje competir con la handbike, volveré al billar.
¿A qué personaje retaría en su deporte?
A cualquier deportista de alto nivel para que sepa lo difícil que es y lo que se sufre en el ciclismo.
¿Qué fotos decoraban su habitación cuando era pequeño?
Nunca he sido mitómano, no he tenido poster en la habitación.
Cuando era niño, ¿con qué soñaba ser de adulto?
Con ser futbolista.
Algo que aún no haya hecho y que le gustaría hacer.
Seguir viviendo feliz y tranquilo y practicar deporte, nada más.
Si fuese presidente del Gobierno, ¿qué cosas haría o cambiaría?
Soy apolítico, no me gusta nada como lo están haciendo en este país, pero tampoco lo criticaría, es un papel muy difícil de asumir y no me gustaría verme en el lugar del presidente del Gobierno.
Si pudiera cenar con cualquier personaje, ¿a quién elegiría?
A Fernando Alonso.
¿Cuál es su forma de desconectar?
Viendo series y estando solo.
¿Qué alimento nunca falta en su nevera o despensa?
Café, leche y chocolate negro sin azúcar, eso es innegociable -ríe-.
¿En qué tarea doméstica podría aspirar a medalla?
Cocinar se me da muy bien, mis platos estrellas son los arroces.
¿Qué suele ver en televisión?
Muchas series y películas.
Una canción que le motive.
No tengo una específica, me gusta escuchar de todos los géneros, desde salsa, música romántica, balada o rock hasta canciones de Julio Iglesias.
Reportaje. Israel Rider, un handbiker con determinación a ras de suelo
